Hablar sobre el Prestige es hablar sobre una de las mayores catástrofes ecológicas ocurridas en Galicia y en España en los últimos años.El prestige era un buque monocasco de liberia que en el momento del hundimiento transportaba la cantidad de 77.000 toneladas de fuel desde Letonia hasta Gibraltar.
El 13 de noviembre de 2002, el buque se encontró envuelto en un temporal de hasta 50 nudos de viento y olas de 6 metros, que provocó daños irreversibles al prestige y le condenaron al hundimiento.
Se lograron rescatar a 27 tripulantes del barco, y mientras el gobierno español tras ordenes de por aquel entonces ministro de fomento, Francisco Álvarez Cascos, intentaba alejar el buque lo más lejos de la costa gallega éste se partió por la mitad, hundiéndose a una profundidad de 3.850 metros y a una distancia de 250 kilómetros de la costa.
El daño ecológico y económico de la zona fue desastroso, e incluso aún tiene repercusión en la actualidad. El 2 de Enero de 2003 los restos de combustible derramados por el buque se econtraban a tan sólo 50 kilómetros de la costa y posteriormente los restos llegaron a la costa.
Las consecuencias económicas de la catástrofe fueron enormes, el por aquel entonces ministro de agricultura Miguel Arias Cañete, estimó unas pérdidas de 24 millones de euros al mes por la pérdida de actividad en el sector pesquero de la zona y se comunicó al fondo internacional de indemnización de daños por hidrocarburos unas pérdidas de 795,5 millones de euros.
Pero quizá, lo más grave de toda la catástrofe fueron la cantidad de aves y demás animales de las costas españolas, portuguesas y francesas que se encontraron muertos por causa del petróleo vertido sobre el mar.
Tras el desastre todos los buques monocascos similares al prestige fueron apartados de las costas de españa y francia y se prohibieron en toda la unión europea los petroleros monocasco como el que originó la desgracia.
Aún a día de hoy se siguen encontrando restos de fuel cerca de las costas gallegas y el nombre del prestige vuelve a sonar 10 años después, pues se ha pospuesto el juicio a noviembre de este mismo año, fecha en la que empezarán a declarar los acusados del caso.
